Septiembre es un mes clave tanto para los judíos como para los musulmanes. Este año, coincide el comienzo de las dos festividades más importantes de las dos creencias.
Los judíos celebran el Año Nuevo que tiene un tono especial de introspección y penitencia que dura diez días desde el Año Nuevo (Rosh Hashaná) y el Día del Perdón (Yom Kippur). Los años judíos se numeran a partir de la fecha tradicional de la creación del mundo, en el 3761 aC, por tanto ellos se encuentran en el 5768.
Los musulmanes, por su parte, celebran el Ramadán (en árabe se dice shawn, que significa ayuno) y dura prácticamente un mes, no cae todos los años en la misma fecha, por ejemplo, este año (1428) va desde el 13 de septiembre hasta el 12 de octubre de 2007. No deben comer nada durante las horas diurnas, solo a partir de la caida del sol.
A pesar de esta coincidencia, utilizan calendarios diferentes: los judíos utilizan el lunisolar y los musulmanes el lunar. Diós creó el mundo en septiembre, el mes en el que yo también nací.
Dios creó al primer hombre, Adán, el 13 de este mes, quizá por eso yo nací tal día como hoy, 14 de septiembre, un día después de Adán.
Israel ha cerrado, con motivo de las amenazas que reciben estos días, la Franja de Cisjordania. Lamentablemente, y a pesar de ser tan devotos, parecen no entender, ni unos ni otros, que la situación es tan penosa que al menos yo no encuentro adjetivo para calificarla. En mi cumpleaños me gustaría que alguien me diera la certeza de que la paz va a llegar pronto.
Buen ramadán y buen año. Salut.
No hay comentarios:
Publicar un comentario